Ayer os contábamos la existencia de unas fotos sobre el que supuestamente será el nuevo modelo de iPhone OS 4.0, advirtiendo de todos los rumores que se habían vertido sobre esta aparición. Hoy queremos explicaros todo lo que ha ocurrido. (una vez más, supuestamente).

El pasado 18 de marzo uno de los empleados de Apple cometió un error, y no fue precisamente tomarse demasiadas cervezas, sino lo que eso le supuso. Perdió su teléfono móvil, el cual cayó detrás del taburete en el que estaba sentado.

Justo un momento después una de las personas que también se encontraba en ese bar, situado en California, lo cogió y vió que era un móvil de Apple, un iPhone. Sin saber cómo ni porqué, se dio cuenta de que tenía la aplicación de Facebook. Según este señor, él trato de contactar con Apple, pero le fue imposible.

Entonces decidió seguir jugando y toqueteando este aparatito, y descubrió que no era un iPhone normal, ¿qué raro no? Se preguntaría cuando vio que tenía dos cámaras (una en el frontal y otra en la parte trasera). Al darse cuenta de que no era el típico iPhone, decidió hacerle fotos y venderlas para ganarse un dinerillo. Así que se las mostró a Engadget.

Hace unos días, es decir, un mes más tarde de que ocurriera todo esto, Engadget comenzó a circular las fotos por Internet, y ello ha supuesto rumores y más rumores sobre cómo será o podría ser el nuevo iPhone.

¡No todo acaba aquí! ¡¡Aún hay más!! El mayor rival de Engadget, Guizmondo se adelantó a comprar el dispositivo por el módico precio  de 5.000 $. Desde entonces Guizmondo empezó a contar la historia con su propias palabras, lo que le ha supuesto millones de visitas a su web, unos 28.000 tweets y más de 1.870 comentarios en apenas tres días y por supuesto, multitud de rumores.

Lo que seguro no se esperaba la gente de Guizmondo es que el mismo Steve Jobs, a través de Bruce Sewell, vicepresidente de Apple, les pidiera la devolución de este dispositivo, ya que si no lo hacían podrían considerarlo como un robo. A todo esto Guizmondo respondió que se lo devolverían, sólo tendría que decirle dónde y cómo. Incluso se permitió bromear con él: "espero que no tenga muy en cuenta lo ocurrido y no lo pague con el chico que lo perdió. No creo que él ame a Apple más que nadie".

Y... colorín colorado ¿esto se ha acabado?

Pues seguramente no, porque ahora el debate se centra en si esto ha sido real o todo planeado. Es decir, si ha sido una estrategia de marketing por parte de Apple, o simplemente un mal descuido por uno de sus trabajadores... Desde siempre Apple ha sido muy precavido con todos sus productos, sólo mostrándolos por primera vez el día de las presentaciones, así que tampoco habría sido muy acertado planear esta estrategia.

De lo que estamos seguros es que algúna día, no muy lejano, sabremos la verdad. Como siempre, y una vez más, nos tocará esperar.

Via. Fortune