El workshop como focalizador de un proyecto
26 July 2016
¿Cómo afrontar proyectos que involucran múltiples agentes con capacidad de decisión sobre los mismos?
Tal vez una de las partes más complicadas dentro del desarrollo de aplicaciones para dispositivos móviles (y seguramente para cualquier proyecto de desarrollo), es hacer converger los diferentes puntos de vista de los participantes en un proyecto.
La parte de negocio tiene, por ejemplo, unos objetivos que perseguir (en ocasiones no demasiado claros), tales como mantener una imagen de la marca lo más coherente posible, el aumento de ventas, el asentamiento de su producto en un mercado muy competitivo, entre otras posibilidades.
Los usuarios potenciales del futuro servicio o producto en cambio cuentan con sus propias necesidades, su modelo mental. No ven la vida con la simplicidad y buenrollismo con las que suelen ser bombardeados por las diferentes marcas.
Los departamentos de Sistemas, desarrolladores, partners tecnológicos, etc., tienen una visión muy pragmática de cómo afrontar un proyecto. No se entretienen en refinamientos de cara a los usuarios o incluso a la coherencia de la marca. Cuentan con sus propios problemas, sorteando una arquitectura obsoleta, la falta de recursos o un sistema construido a base de parches.
¿Qué hacemos con todo esto?
Nos metemos en una sala amplia con representantes de estos 3 estamentos que hemos mencionado: Negocio, Usuarios y Sistemas, y comenzamos a realizar dinámicas de cocreación con ellos.
Actuamos como conseguidores y catalizadores, para personas que no están acostumbradas a formar parte de un proceso de ideación.
Les ayudamos a dar forma a sus ideas, las ponemos en el centro del debate y confrontamos los diversos puntos de vista, hasta ir trabajando las características que la aplicación debe, y lo que es más importante, puede tener.
El proceso es muy gratificante para todos los participantes, ya que sienten que hay un foro donde exponer sus puntos de vista. Además de ver como otros actores tienen sus propias metas y limitaciones.
¿Y cómo lo denominamos?
Para nosotros, todo este trabajo se denomina workshop de cocreación y forma parte de nuestra metodología de diseño centrado en el usuario.
En iPhonedroid utilizamos estos workshops como un compromiso: una forma de involucrarnos totalmente con un proyecto, ganar rápidamente background y conocer a nuestros clientes.
Y sabemos que nuestros clientes, cuando lo prueban, repiten.
Tal vez una de las partes más complicadas dentro del desarrollo de aplicaciones para dispositivos móviles (y seguramente para cualquier proyecto de desarrollo), es hacer converger los diferentes puntos de vista de los participantes en un proyecto.
La parte de negocio tiene, por ejemplo, unos objetivos que perseguir (en ocasiones no demasiado claros), tales como mantener una imagen de la marca lo más coherente posible, el aumento de ventas, el asentamiento de su producto en un mercado muy competitivo, entre otras posibilidades.
Los usuarios potenciales del futuro servicio o producto en cambio cuentan con sus propias necesidades, su modelo mental. No ven la vida con la simplicidad y buenrollismo con las que suelen ser bombardeados por las diferentes marcas.
Los departamentos de Sistemas, desarrolladores, partners tecnológicos, etc., tienen una visión muy pragmática de cómo afrontar un proyecto. No se entretienen en refinamientos de cara a los usuarios o incluso a la coherencia de la marca. Cuentan con sus propios problemas, sorteando una arquitectura obsoleta, la falta de recursos o un sistema construido a base de parches.
¿Qué hacemos con todo esto?
Nos metemos en una sala amplia con representantes de estos 3 estamentos que hemos mencionado: Negocio, Usuarios y Sistemas, y comenzamos a realizar dinámicas de cocreación con ellos.
Actuamos como conseguidores y catalizadores, para personas que no están acostumbradas a formar parte de un proceso de ideación.
Les ayudamos a dar forma a sus ideas, las ponemos en el centro del debate y confrontamos los diversos puntos de vista, hasta ir trabajando las características que la aplicación debe, y lo que es más importante, puede tener.
El proceso es muy gratificante para todos los participantes, ya que sienten que hay un foro donde exponer sus puntos de vista. Además de ver como otros actores tienen sus propias metas y limitaciones.
¿Y cómo lo denominamos?
Para nosotros, todo este trabajo se denomina workshop de cocreación y forma parte de nuestra metodología de diseño centrado en el usuario.
En iPhonedroid utilizamos estos workshops como un compromiso: una forma de involucrarnos totalmente con un proyecto, ganar rápidamente background y conocer a nuestros clientes.
Y sabemos que nuestros clientes, cuando lo prueban, repiten.
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