Hoy se cumple un año de la desaparición de una de las personas más influyentes en el mundo tecnológico y en la movilidad. Steve Jobs fallecía a los 56 años víctima de un cáncer.

De Steve Jobs se ha dicho que era el mejor visionario de todos los tiempos, no sólo era el genio de la tecnología, sino que también era capaz de dotar a un teléfono móvil de todas aquellas características y dimensiones que todo el mundo deseaba.



Un año después, Apple sigue sumando beneficios, a pesar de no contar con la  figura de Steve Jobs.  La compañía ha batido récords en la bolsa, pasando a ser la empresa con la mayor capitalización.

Tim Cook, el “sucesor” de Steve Jobs, decidió garantizar la época de bonanza de la compañía, asegurando la permanencia de sus ejecutivos con un contrato de 5 años más y una suma millonaria.

Los resultados tras la desaparición de Steve Jobs siguen siendo positivos: se han vendió más iPhones, tablets y Mac que nunca, logrando ingresos trimestrales de récord.

En el lado opuesto a lo bien que va la compañía tras la muerte de Jobs, se encuentran algunos usuarios desilusionados que no encuentran en los productos de Apple la novedad que Steve les daba en sus conferencias de presentación.

También los rivales de la compañía han logrado mejorar tanto las prestaciones de sus smartphones y tablets que los analistas se cuestionan que smartphone es más novedoso en el sector móvil.

Además de por la novedad y expectación que causaba, Steve Jobs también destacaba por su manera de hablar. Nos dejó frases que causaron y siguen causando sensación como:

"Tu tiempo es limitado, de modo que no lo malgastes viviendo la vida de alguien distinto. No quedes atrapado en el dogma, que es vivir como otros piensan que deberías vivir. No dejes que los ruidos de las opiniones de los demás acallen tu propia voz interior".

"No tenemos la oportunidad de hacer muchas cosas, por lo que cada cosa que hagamos debe ser excelente. Porque esta es nuestra vida".

"A veces cuando se innova, se cometen errores. Es mejor admitirlo rápidamente y continuar con otras innovaciones".

"Cambiaría, si pudiera, toda mi tecnología por una tarde con Sócrates"